lunes, 3 de abril de 2023

YOLANDA DÍAZ, SIN LOS DE HUBIERAN PODIDO

 

No es que SUMAR fracase sin PODEMOS, es que con PODEMOS no se puede. Podemos hoy no es otra cosa que la camarilla de Pablo Iglesias que integra a unos pocos que no tienen más aspiraciones que conservar los ingresos económicos que le puedan dar sus cargos a expensas del erario, como fruto de su arrogancia en defensa de un dogmatismo enfermizo de exclusiva confrontación.

 Iglesias puso a dedo a Yolanda Díaz, posiblemente sin consultarla previamente, partiendo que era suya y que ella actuaría a su dictado, y esta vez, le salió mal, puesto que Yolanda nunca fue de él.

 No es nada raro que ahora Pablo Iglesia defienda unas primarias “abiertas” después de poner a dedo a Yolanda sin primarias, y eso sucede porque ha visto que, si no coloca a los suyos en las listas electorales en los primeros puestos para que puedan salir electos, su preminencia de macho alfa se va al garete.

Pablo Iglesias ha sido un fraude moral y político, pero como cuenta con muchos fanáticos, unos auténticos y otros criados a pesebre, intentará hacer todo el daño que pueda a Yolanda y a su formación Sumar. Hoy por hoy Yolanda es su mayor enemigo, y él preferirá que en las próximas elecciones gane la derecha a fin de que con su gritones y gritonas, contra la derecha vivan mejor, como aquellos que contra Franco vivían mejor. Y ojalá le salga mal.

Yolanda es para Iglesias su mayor enemigo, no porque ella quiera serlo, que no quiere, sino porque Iglesias sobrevive  en la confrontación, en el cuánto peor mejor. Si Sumar consiguiera en la próxima legislatura hacer un gobierno de coalición con el PSOE de Pedro Sánchez, Iglesias desaparecería o se unirá con los separatistas catalanes y vascos, puesto que su vocación se halla en segregar, dividir, enfrentar; no le interesa ser alternativa puesto que no tiene ni quiere tener nada que ofrecerle a España; y a Yolanda no le interesa ganarles a los fascistas sino ganar un país, y por ello es la antítesis de Iglesias.

El Podemos de Iglesias no estuvo negociando con Yolanda para acompañarla el 2 de abril cuando ella se postuló como presidenta del gobierno para las elecciones generales de diciembre; no, solo la presionó para poner a los suyos que él maneja en los puestos claves de las listas; a él solo le preocupan las listas no el programa, le importan los “quienes” no el “para qué”. Y Yolanda resistió, y al resistir se ha convertido en la enemiga de Iglesias a batir, y consecuentemente en una esperanza.

Barcelona a 3 de abril del 2023.- RRCh.