lunes, 20 de abril de 2015

Los niños que matan


 

Desde que los padres y los maestros se convirtieron en amigos de sus hijos y alumnos, lo niños se quedaron sin padres y sin maestros. Ahora que todos somos amiguetes, hemos de presionar para subir las penas bajando la edad para que nuestros amigos menores descarriados vayan a la cárcel, o les metamos en un centro psiquiátrico para que le traten el brote psicótico. Y más policía para que les controlen mientras tanto.  Cada vez tenemos más recursos para atajar  las consecuencias una vez producidas, y somos más idiotas para tratar las causas. Podría ser, es un suponer, que nos hemos perdido el respeto, un concepto en desuso, sustituido por analgésicos tecnológicos que nos permiten conectar con el mundo entero en tiempo real y en perfecta desconexión con el entorno inmediato. La solución que se apunta de bajar la edad para el encierro o descubrir nuevos diagnósticos psiquiátricos con terapias de apartamiento, nos dará unos resultados estupendos cuando los chavales hechos hombre y mujeres se “reinserten” en la sociedad, que les esperará protestando por que salgan tan pronto.

 

Barcelona a 20 de Abril del 2015.- RRCH

No hay comentarios:

Publicar un comentario